domingo, 26 de octubre de 2008

Capítulo 2 (II)

Patri decidió volver hacerle un privado a Tatau. A ver si esta vez tenía más suerte y le contestaba.
- Toc, toc ¿se puede? ¿Hay alguien en casa? Tranquila, si sólo quería saludarte. Me han dicho que eres nueva en el chat. Y como soy la relaciones públicas, he venido a presentarme.
Esta vez si obtuvo respuesta.
- Hola.
- Vaya una chica muy habladora ¡eh! Bueno igual estás ocupada. No quería molestarte. Si lo he hecho, lo siento.
- No, no estoy ocupada. Lo que pasa es que no suelo hablar mucho.
- Bueno así cómo quieres relacionarte con la gente del chat. Debes intervenir más o sino te aburrirás.
- Me gusta leer lo que escriben en la general. Así me entretengo.
- Y ¿nunca dices nada? ¡Ah sí! ya me han dicho que saludas cuando entras y te despides cuanto te vas.
- Sí más o menos es lo que hago.
- Y ¿no te aburres?
- No.
- Bueno, vayamos a las formalidades. Me llamo Patri. Bueno ese es mi nick, aunque como te habrás imaginado ese no es mi nombre.
- No me imaginaba nada. Pensaba que te llamabas Patri.
- No ¡que va! Ese es mi nombre de guerra. Te puedo preguntar algo, si no es mucha molestia.
- Pregunta ya veré si respondo.
- Vaya una chica dura ¡eh!
- No, no soy dura.
- Bueno, a lo que iba. Me ha dicho un pajarito que eres de Dénia.
- Me tengo que ir.
- Oye, espera. Puedes estar tranquila. La persona que me lo ha dicho no se lo ha dicho a nadie más y yo no pienso decírselo tampoco a nadie. Así que tu secreto está bien guardado, estate tranquila, te puedes fiar de mí. Yo soy de Xàbia.
- Sí, soy de Dénia.
- Oye que tampoco pretendo saber quien eres. Por lo menos de momento.
- ¿De momento?
- Sí de momento. Bueno para que no te sientas incómoda te apetece hablar de algo en especial.
- No sé.
- Bueno, podemos hablar del tiempo, de lo que quieras. Ah se me olvidaba, podemos hablar de todos los temas que quieras menos de sexo. No hablo de sexo por el chat. No me gusta.
- Me parece bien, porque yo tampoco voy hablar de sexo.
- Bueno ¿quieres que saque yo un tema?
- Vale.
- Bueno, a ver. ¿Te gusta el cine? Qué original que soy, ¡eh! Es lo clásico.
- Sí, sí que me gusta. Pero no voy mucho al cine.
Estuvieron hablando durante media hora. Cuando ya se iban a despedir, Patri le dijo:
- Oye, ¿vas a entrar mañana?
- No lo sé. Por qué me lo preguntas.
- Para saberlo. Me ha gustado hablar contigo y si entras mañana y te apetece, podemos seguir hablando para así seguir conociéndonos un poco más.
- No lo sé. Lo más seguro es que entre un ratito, pero no lo sé.
- Bueno, espero que sí que entres, así que hasta mañana. Buenas noches.
- Buenas noches. Adiós.
Tatau salió del chat. Patri le hizo un privado a Alma.
- Rehola. He hablado con ella.
- Lo sabía. Como no has dicho nada en la general después de poner la poesía me lo he imaginado. Y ¿qué tal?
- Bueno no sé. Me ha costado mucho que me contestara. Pero ya sabes, con un poco de ingenio, todo se consigue.
- Je, je, je. ¡Eres tremenda¡
- Al principio se ha asustado cuando le he dicho que me había dicho un pajarito que era de Dénia. Me ha dicho que se tenía que ir porque le he dicho que era de un pueblo de al lado.
- Pero no se ha ido.
- No, no se ha ido. Hemos hablado. La verdad es que tampoco hemos hablado de temas triviales. He sacado varias conversaciones. Nos hemos reído un poco.
- Pero habéis estado un buen rato hablando ¿no?
- Pues la verdad, no lo sé. Se me ha pasado el tiempo volando. Parece una chica simpática. De todas formas, tengo que averiguar quien es. No me gustaría que fuera mi vecino de enfrente.
- Je, je, je. ¡Vaya susto si lo fuera!
- Ja, ja, ja. Pues sí, sería un susto tremendo. Le he dicho que si entraba mañana y me ha dicho que no lo sabía pero que igual entraba un ratito. No he querido pedirle el messenger para no agobiarla. Quiero poco a poco ganarme su confianza, para así saber quien es. ¿He hecho bien?
- Sí, has hecho muy bien. Veo que ya no eres tan impulsiva.
- La verdad es que tengo que dejar de ser tan impulsiva. Ya sabes que me llevo cada chasco. ¡Y el último fue de órdago! Así que lo mejor es ir con pies de plomo, para que después no me salga rana.
- Sí es lo mejor. Ya sabes que tampoco te puedes fiar de toda la gente y tú normalmente lo haces, y eso no es bueno. No debes ser tan confiada Patri.
- Ya lo sé, Alma. Por eso no he querido precipitar las cosas. Ahora me interesa saber quien es. Si la conozco. Ya sabes mi problema cual es y no me gustaría que se fuera corriendo la voz por ahí y que terminara sabiéndolo todo el pueblo.
Patri se despidió de Alma primero y después lo hizo en la general. Sus despedidas eran muy conocidas, todas sabían que antes de marcharse aun estaría unos minutos más, porque no lo podía evitar. Empezaba la cuenta atrás desde diez y cada vez que alguien decía algo, ella contestaba y volvía a empezar otra vez. Las chicas la mayoría de las veces empezaban a preguntarle cosas para que así no se fuera. El récord de su despedida más larga era de media hora.
Salió del chat. Era tarde, así que ya no se puso a escribir su novela. Lo haría mañana.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gusta...me gusta mucho como va se va desarrollando la historia.
Me mantienes a la espera, mi Teta....jejeje!!!!

P.D: has nombrado un nick del chat (Ada)que nó sé si es la misma que conocí hace un tiempo. Es de Canarias y muy despistada y graciosa.

Besos

Tanais dijo...

jajaja me parto como la Ada esa sea la misma que dice Luna, si es que en el fondo el mundo es mu pequeño...

La historia va cogiendo ritmillo, q ganas de saber que más va a pasar!!!!

Mía dijo...

ME gusta mucho que cuentes la historia deesde las dos perspectivas!

Un besitoooooo y que tengas un buen domingo!!

Canby dijo...

A la espera del siguiente,besos

Anónimo dijo...

Bueno, pues a ver si se van conociendo un poco más y a ver cómo va...

Besicos =)