jueves, 5 de junio de 2008

Qué hacer?

He entrado en el blog de una desconocida que me ha dejado un mensaje de ánimo en mi blog. Y claro he aprovechado para echarle una miradita a lo que había escrito. Cuando estaba contestando a su último mensaje, se me ha ocurrido escribir mi experiencia sobre el mismo.
Lo he titulado "Qué hacer?" porque la verdad es que es esa, que no sé qué hacer. Es amiga mía desde hace ocho o nueve años. Hace años que ella sabe lo mío y la verdad es que ha sido un gran apoyo para ayudarme a abrir los ojos y darme cuenta de que la vida hay que vivirla, que no hay que calentarse la cabeza. La verdad es que desde que la conocí me gustó. Es una chica normal y corriente, tampoco digamos que es un bellezón, simplemente normal y corriente.
En una cena, hace unos cinco años, nos sentamos juntas, hablábamos y hablábamos. Para nosotras no había nadie más. Tampoco eran conversaciones muy triviales, bueno hablábamos de política, pero sin llegar a ser trascendentales. Y a medida que íbamos hablando fuimos acercándonos. Prácticamente su boca estaba junto a la mía, apenas nos separaba un centímetro. De repente me incorporé y dejé de soñar. No era el lugar ni el momento adecuado.
La última que me ha pasado con ella es la que a veces me quita el sueño. Sí me lo quita porque no sé si algún día seré capaz de no frenar mis impulsos, esos que muchas veces me hacen cometer locuras y otras, cuando debo cometerlas, me frena.
Y ocurrió en marzo. Concretamente en fallas. Yo terminé tarde de trabajar y me la encontré de casualidad en un bar. Yo iba a picar algo con un amigo, ella llevaba bastante rato allí y bebiendo unas cervezas. Estaba contenta. Así que se sentó un rato con nosotros. Antes de irse me dijo dónde iba a cenar y que me pasara. Cuando se fue, mi amigo me dijo, tú estás segura de que no entiende? Bueno si te ha estado tirando los trastos todo el rato. Entonces le contesté que no sabía cómo era un juego que hacía tiempo que llevábamos. Cuando mi amigo se fue yo pasé por el bar que estaba cenando. Me senté a su lado, porque la verdad no conocía al resto de la gente, y entonces ella empezó a decir tonterías. Tal vez demasiadas. Yo poco a poco iba poniéndome enferma. No sabía qué hacer. Por suerte terminó la cena y nos fuimos a pub. Allí empezó a bailar conmigo, a mordisquearme el cuello. Bueno, la verdad es que no sabía que hacer. Ella estaba demasiado borracha y yo demasiado serena -no bebo alcohol- como para aprovechar el momento.
Dos o tres horas después, cuando íbamos a seguir la fiesta en otro pub, se colgó de mi cuello y me repitió varias veces "vamos a acostarnos". Yo no daba crédito a lo que estaba oyendo, pero lo estaba diciendo. Entonces, la solte de mi cuello y le dije, no, te llevo a casa y te vas a dormir. Y así lo hice.
Al día siguiente me invito a ver una "mascletà" y le dije que bien. Cuando nos encontramos le dije:
Yo: Anoche casi me haces perder la cabeza.
Ella: Ah sí?
Yo: Sí. Estuviste toda la noche provocándome y a punto estuve de cometer una locura.
Ella: Ah sí? No recuerdo nada.
Yo: Pues si no recuerdas nada mejor.
Ella: Anoche te mordí el cuello?
Yo: No, no me lo mordiste.
Ella: Jo, no recuerdo nada. Me duele la cabeza.
Yo: Bueno, pues no vuelvas a estar así cuando estés conmigo porque perderé la cabeza.
Ella: Es lo que te apetecía, pues haberlo hecho.
Yo: Estás segura? Eso es lo que querías?
Bueno, a ver si me explico. Cómo acostarte con una amiga, cuando está borracha? El día que me acueste con ella o con cualquier otra mujer, quiero que lo desee tanto como yo. Y sobretodo que sea consciente de lo que hace. No me valen las que van ciegas. Así no me vale.
Sé que muchas pensaréis que soy tonta. Sí tal vez lo sea. No seguramente lo sea. La verdad es que lo soy, pero más de lo que os imaginéis. Pero tengo claro una cosa. Si se presentara la misma ocasión haría lo mismo.
Pero también tengo claro otra cosa. Que si va provocándome me va a encontrar.
Lo que creo es que le da morbo pensar en dos mujeres juntas. Y tiene ganas de probarlo pero al mismo tiempo tiene miedo. Creo que eso es lo que le pasa a la mayoría de las heteros. Es una lástima que no lo prueben porque estoy segura que repetirían.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Tu misma lo has dicho, si provoca tanto será porque algo quiere. Así que la proxima vez te acuestas con ella y si luego se arrepiente que se fastidie y q no vaya x ahí calentando al personal jajjaja

Anónimo dijo...

x dios! x fiiin! te vuelvo a encontrar..gracias x leerme,y me alegro mucho de que te gustara mi post y escribieras sobre algo que te recordo en el tuyo.
no me dejaste tu direccion y te perdi la pista,y al leer a tanais,coñoooo eras tu de nuevooo
y claro no keria perderme la historia,y mucho menoos-...


FELIZ CUMPLEAÑOS PIVON!!!!

q cumplas muchos mas!
te meto en enlaces y asi ya no te pierdo,te parece? besos