lunes, 23 de junio de 2008

Dudas

Me han entrado las dudas. No sé, su forma de comportarse sigue desconcentrándome. No ha quedado conmigo a solas. Bueno eso era de esperar. Lo que no me esperaba es que no quisiera venir conmigo a Chueca. No sé, eso me ha desconcertado. Y también lo que pasó el viernes por la noche. Se cabreó -aunque no conmigo!- y después su respuesta fue de lo más desconcertante. Si que voy, y a los cinco minutos no voy. Excusa tonta la del metro y más aun la siguiente, que no se encontraba bien.
Bueno ahora voy a cambiar la forma de actuar. La desidia va a ser mi carta a jugar. Vamos a ver si así responde o no. Algo me dice que mi intuición es buena. Sigo creyendo en ella. Estoy convencida. Pero son muchas de cal, demasiadas. Y eso es lo que me desconcentra.
No sé leer las señales? No lo sé, creo que no. Pero sé lo que he vivido, lo que ha hecho y eso no lo puede negar. Ni ella ni nadie. El insconciente la ha traicionado alguna vez. De eso estoy segura. No sé, pero estoy convencida de que lo que he vivido y he visto no ha sido puro espejismo. Es real, como la vida misma.
Está claro que ella sabe cuales son mis sentimientos. Y como me dijo en su día, si sintiera lo mismo por mí, ya me lo habría dicho. Pero eso son palabras. Sé lo que ha hecho, sus gestos, esos pequeños detalles que no pasan desapercibidos.
Lo que no entiendo es por qué se comporta tan diferente, cuando está a sólas conmigo y cuando hay gente a nuestro alrededor.
Y eso es lo que me desconcierta.
La paciencia es lo mío, aunque a veces no puedo frenar esa impulsividad que me lleva a hacer cosas en ese instante. Ahora intentaré frenarla. Y así, ver qué sucede a mi alrededor.
Y aun así tengo mis dudas. Unas dudas que sé que con el tiempo se aclararán.
Y es que por qué cuando una chica se acerca a mí, ella no deja de "espiar".
Por qué a veces hace esos comentarios? Son innecesarios. Pero creo que si los hace, será porque le "pica", no?
Nó sé, sigo teniendo dudas. Dudas. Y sin embargo, estoy bien. Soy feliz. No sé cómo explicarlo. Estoy bien. Y sobretodo a diferencia de lo que puedan opinar los demás. No me duele nada. No me duele en absoluto. A veces incluso pienso que me da igual. Si llega a buen puerto o no. Porque lo más importante es que soy feliz. Y hacía mucho tiempo que no estaba tan bien.
Pero sigo teniendo esas dudas, dudas que algún día se despejarán y que aclararán el panorama.
Y a pesar de todo. Sé que llegará a buen puerto el velero en el que estoy navegando a la deriva.
Es una contradicción? No lo sé. Lo único que sé, es que sigo teniendo dudas.

No hay comentarios: