jueves, 26 de junio de 2008

La indiferencia es la mejor arma

Hoy ha sido un día congestionado en el plan emotivo. Porque son varios los frentes que tengo abiertos a los que intento poner solución. Pero algunos son prácticamente imposibles de resolver. Y bueno, como la congestión con alguna "pastillita" se va, he decidido tomarme una que no sé si conoceréis pero que a veces viene estupendamente. Se llama "indiferencia". Y me voy a explicar.
Llevo unos días agotadores psicológicamente. Problemas, más problemas, más problemas, y super problemas. Y si éramos pocos, parió la burra. Encima aparece un "lumbreras" que me quiere "machacar". Sí, para que nos entendamos, darme por culo -con perdón de la expresión-.
Y claro, tal vez no se habrá dado cuenta de que no ofende quien quiere, sino quien puede. Y mira por donde, no me da la gana que me ofenda. Así que, no quiero que lo haga. No lo va a conseguir por muchos e-mails que envie metiéndose conmigo, con mi madre, mis antepasados, etc. etc. etc. Y por muchos e-mails que les envie a mis compañeros de teatro. Qué más da! He decidido que me resbala todo. Por qué, porque no merece la pena perder el tiempo con quien no lo vale. Y para mí, de ser una persona valiosa ha pasado a ser insignificante.
Ayyyyyyyyy, si jode la indiferencia. Él es el que me quiere machacar, él es el que quiere que yo explote. Pero no, no lo voy hacer. Me gusta la indiferencia, porque esa indiferencia hace que el que se joda en verdad sea él. Y encima, mis compañeros saben que no está bien de la cabeza y que está para que lo encierren. Y bueno, pues qué se le va hacer, pobrecito, ya no tiene remedio!
Sabéis qué, mi sobrina de dos años -que por cierto cumplirá el lunes- no hace las tonterías y chiquilladas que hace él. Joer, será eso cierto de que a medida que te haces viejo llegas a un punto que vuelves a ser como un niño? Creo que sí, porque así es como está. Empieza a ser otra vez un niño, pero joer, qué malcriado, egoísta, etc. etc. etc., bueno pondré un par de etc., etc., porque creo que me he quedado corta!
En fin! que para que lo sepáis, que no me ofende. Que no puede, que me entra por uno oído y me sale por el otro toda su verborrea. Que me da igual. Bastante problemas tengo yo con intentar que el barco en el que navego no se hunda y siga a flote para que arribe a buen puerto.
Y "mi amor" también empieza a estar harta de todo este jaleo. Joer, por qué la gente se aburre tanto, que pierde el tiempo intentando joder a los demás? No tendrán otra ocupación mejor en esta vida?
Por favor, si yo dispusiera de tiempo libre, seguro que no lo malgastaría en esas tonterías!!!
Bueno, que lo tengo claro y decidido que no me calienta la cabeza más. Así que le he eliminado del messenger y que también he decidido que todos sus e-mail los voy a borrar directamente sin leer.

Así que si tenéis a un "ejemplar" como el que yo tengo tocándome las narices, mejor no hacerle caso. La indiferencia es el mayor desprecio que se le puede hacer a alguien. Y seguro que eso le jode más que el hecho de que me ponga a su mismo nivel a insultarle. Si no me creéis hacer la prueba y veréis, como tengo razón.

Así que por eso, la indiferencia es la mejor arma. No dispara balas, no mata, pero jode mogollón!

5 comentarios:

Anónimo dijo...

pues a ver si me mandas una tabletita de esas pastillitas,que como tu dices son lo mejor ante segun que..personajillo""
hay gente que no se merece el tiempo libre que tiene..en fin..
un besillo mu grandote

Suassi dijo...

Venga aquí te envio una, no mejor dos, tabletitas de pastillitas de indiferencia para que puedas tener esa coraza que hace falta para que nadie ni nada puedan molestarte. Acuerdate, indiferencia. Esa es la solución para esa clase de personajes que se quedarán con las ganas.
La verdad es que no merecen que les demos un segundo de nuestro tiempo.
Otro besazo para ti

Anónimo dijo...

Tenéis razón. La indiferencia es un arma muy poderosa. Ocurre que el "enemigo" busca enfrentamiento con insulto o agresión y, cuando se encuentra con el terrible muro de la indiferencia, se hunde en su propia miseria.
ay una técnica de lucha orientas que se basa en aprovechar la fuerza de ataque del enemigo y encauzarla hacia él. Pues bien queridos amigos las dos pastillas INDIFERENCIA y DISTANCIA son soluciones que, psicológicamente, hunden al "enemigo" en su miserable condición de necio y grosero.
Si vuestra indiferencia y distancia están haciendo efecto, volverá a atacar usando sus torpes armas Y, cuanto más ataque, aunque os parezca que no se da por aludido, significará que se siente derrotado.
Si no llega al grado de imbécil crónico, dejará la batalla, pero como estos pelusas son catetos funcionales (boina rosca chapa) seguirá hundiéndose en su miseria. Pero vosotros disfrutad con ello, porque es que LO ESTÁIS MACHACANDO.
La violencia es de obreros, seamos señores.
Saludos a todos al decir todos me refiero a todas y todos, por ese orden).

Anónimo dijo...

Lamento alguna falta de mecanografía en el comentario anterior que ruego corrija el moderador, gracias.

Anónimo dijo...

Muy buen artículo, me siento plenamente identificado con las ideas aquí plasmadas, hay que darles una lección de cultura y educación a esos desadaptados.